El apalancamiento es una herramienta financiera que permite a los operadores aumentar su exposición a un instrumento sin necesidad de invertir la cantidad total de capital necesaria para poseer el activo por completo. Con el apalancamiento, los operadores pueden abrir posiciones utilizando sólo una fracción del valor total de la posición, amplificando así el rendimiento potencial de su inversión.
Sin embargo, es fundamental comprender que si bien el apalancamiento puede magnificar las ganancias, también amplifica las pérdidas. Por lo tanto, los operadores deben tener precaución e implementar estrategias de gestión de riesgos al utilizar el apalancamiento en sus operaciones.